Nuestros “periodistas especializados” han comenzado a vislumbrar lo que desde estas líneas anunciábamos hace 15 meses. El Covid-19 existía y existe, contagia y mata, y debemos cuidarnos; pero el virus más peligroso, el que exigía y exige nuestros mayores cuidados, era, y es, el gobierno mismo.
Nuestra constitución solo permite medidas excepcionales por tiempo determinado y con una clara justificación, como cuando reinaba el desconcierto y/o no se contaban con las herramientas o instalaciones necesarias para enfrentar la crisis. Sin embargo, cuando todos los empleados públicos, y muy especialmente los políticos, no trabajan y cobran, o cuando sólo se ve cartón pintado en Tecnópolis como resultado de las medidas de prevención del ministerio de salud pública, podemos empezar a desconfiar; y cuando algún Tío Idiota nos dice que nos cuida y los Baradel de turno no quieren ir a laburar, el virus es otro.
También excepcionalmente cada jurisdicción, o conjunto de vecinos, podría dictar las normas que considere para evitar o regular las grandes concentraciones de personas o para enfrentar características muy locales (el Estado ha demostrado que es un elefante –idiota, en este caso- en un bazar).
Los miembros del gobierno nacional no tienen derecho a sembrar el terror y luego hacerse los desatendidos, “enfermaron” a toda la población, solo que aún no hemos podido reconocer todos los daños. Es opinión generalizada que se debe:
- trabajar con todas las fuerzas en detectar los casos. Testeos les llaman, y no se hacen ni desde atrás de un escritorio, ni hablando, ni proyectando “filminas”
- aislar sólo a los enfermos (o a los casos sospechosos). Nunca a todos los ciudadanos, encerrar a los sanos no sirve para nada, no tiene ni lógica ni buenos antecedentes históricos
- usar barbijo, higienizar, y tener cuidado ¡personal! El gobierno nacional no debe tener poderes para ordenar quien subsiste y quien no, ni para decidir cual actividad o función es esencial y cual no, y claramente, si quiere “o necesita” encerrarnos debe hacerlo conforme lo ya establecido en la constitución nacional
No hicieron absolutamente nada para que no muramos (encerrarnos es hacer nada), violaron nuestros derechos y privaron a los niños de educación, nos hundieron en la miseria y no tienen la menor idea como quitarse el corset ideológico de la única perversa neurona que les queda (a Cristina) y que no los deja ni comprar vacunas ni vacunar sin delinquir.
Resultaron lo esperado y “van por todo”, son “Monos con revolver que nos convertirán en un reino-cubano maduro-bananero condenando al pueblo al relato único, al atraso y la miseria.”
El poder ejecutivo está en manos de fanáticos de ideología que se creen todopoderosos (es decir, de idiotas), que están aliados con los miserables populistas anti-hispanocristianos de Latinoamérica (es decir, el Grupo Puebla) y que nunca se darán cuenta que sólo son marionetas de los poderosos del mundo (es decir, Soros y el marxismo cultural) y de los mafiosos locales (es decir, de aquellos que no dudan en volar embajadas y mutuales y/o asesinar fiscales federales y/o robarle un PBI a un pueblo pobre y necesitado como el nuestro sin cargo de conciencia alguno).
En breve tendremos los 100.000 muertos que “intentaron evitar” y fracasaron, una inflación del 50% anual y la pobreza por encima del 60% excediendo aquel 10% que no “les preocupaba alcanzar” y fracasaron, los chicos sin educación, las pymes cerradas, los grandes empresarios escapando a cualquier parte, el Banco Central imprimiendo a lo loco (y prometiendo imprimir aún más) mientras le prende una vela a la diosa del “Yuyito Verde”, la corrupción riendo a carcajadas en los vacunatorios VIP, la reina vociferando contra el poder judicial y zafando de las condenas, los “presos políticos” y los presos violadores y ladrones, todos en libertad, los empresarios amigos enriqueciéndose y “manipulando el blue” en devolución de favores, los fanáticos del patrón de Avellaneda preparándose para expropiar lo que se les ocurra y los fanáticos del “Chuky” de La Plata preparándose para destruir hasta el último “átomo neoliberal” que nos quede, los hospitales practicando abortos "para salvar vidas", los educadores hablando como “tarades” pretendiendo ser inclusivos mientras enferman y castran varones, etc., etc., etc., y ni siquiera llegamos a la mitad del período constitucional. ¡Inútiles! ¡por favor, no nos cuiden más!
Capítulo aparte, y mucho peor, es la Política exterior. Si nadie entiende la política interna con los giros contradictorios de la marioneta que por momentos pareciera que “se le corta algún piolín”, mucho menos se entiende la externa, por momentos rendida a los vejámenes del instituto patria. ¡Tenemos que conseguir vacunas! ¡bruto! ¡animal!
Se peleó con todos los vecinos, puso en peligro el Mercosur, por alabar las actividades terroristas de extrema izquierda no dudó en inmiscuirse con los gobiernos de Chile, Bolivia, Ecuador y ahora con Colombia, reculó con las denuncias por violaciones a los derechos humanos de los dictadores asesinos de Venezuela y Nicaragua, festejó el triunfo de un “De la Rua en USA” (Biden) y se le puso de rodillas, amenazó entre llorisqueos con el “cucharita, cucharón, …" al FMI mientras esgrimía argumentos infantiles (para ser delicado) y también se le pondrá de rodillas, salió a dar lástima en una gira por Europa, no pagó el vergonzoso acuerdo que nos dejó “Chuky” con el Club de Paris y como si fuera poco, no condenó el terrorismo de Hamas creyendo que apoyaba la causa palestina y “le mojó la oreja” a Israel con los derechos humanos; y de regreso, creyendo que halagaba a españoles ofendió a mexicanos y brasileros esgrimiendo su graduación en historia obtenida en el “instituto de investigaciones científicas de Lito Nebbia”… Para muchos esto significa “no alineación”, para mi significa “alienación” de un “pastenaca” que no entiende un pomo.
A las pruebas me remito, ver por favor no se puede ser tan bruto
Vivir en esta Argentina es muy difícil, y dada la ausencia de una autentica oposición, vivir en la Argentina futura amenaza peor.
Sólo podemos agorar que todo continuará empeorando satisfactoriamente.
- Luego de los “torcidos” derechos humanos de Don Raúl apareció “el negocio de los detenidos-desaparecidos” para “alimentar” al “rabioso” perro, a la “ponzoñosa” Hebe y al “ávido” Néstor,
- Luego de los “pesados bolsos volando al sur”, del “reino patagónico de Don Lázaro” y de la mercantilización de la política del "cicatero" Néstor, aparecieron la “neurótica hotelera”, los medios “amigos” de C5N y los bolsos voladores de Lopecito y los de Jaime y los de Barata y los de Don Julio y los de Hugo, y los de “cuadernos” con listas interminables de ladrones,
- Luego de la inutilidad y la torpeza, del “pastillero” y de las memeces del abuelo Fernando, nadie podía imaginar peor presidencia, pero apareció el tío Alberto subiendo al podio de los latosos con una superproducción de al menos una memez por semana. Dice tantas idioteces en tan poco tiempo que hasta los propios lo llamaron a guardar silencio, al menos, hasta las elecciones,
- Y como parece que no hemos aprendido nada, votamos y ¡los pusimos a todos juntos!
- ¿Tenemos lo que merecemos o somos víctimas del engaño? y si somos víctimas del engaño ¿qué esperamos para sacudirnos estas sanguijuelas?
Hoy urge superar este destructivo gobierno de inútiles; mañana, neuronas mediante, urge restaurar la Nación.
Otrora decía: “Si alguno piensa que el Tío Alberto gobierna, peca de ingenuo; y si piensa que este gobierno merece nuestro respeto, peca de … ingenuo”.
Hoy, podría agregar: “Si alguno piensa que el Tío Alberto cuida de nuestra salud, peca de ingenuo; y si piensa que la “neurótica hotelera” cuidará de nuestras obras sociales, peca de … ingenuo”.
¡Qué Dios nos ayude a “pensar la patria”!
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